Consejos básicos para trabajar bien en verano

 

El verano ha llegado y con él el final del curso, el calor, la piscina, las vacaciones, los reencuentros con los amigos… La imagen es fantástica, si no fuera que disponemos de un tiempo limitado para escribir la tesis y hay cosas que no pueden esperar a que comience otra vez el curso. En la entrada de hoy abordo tres problemas de la temporada veraniega, con algunas sugerencias para que siga siendo un período productivo.

Al margen del calor, que puede ser mayor o menor según la zona geográfica y puede resultar más o menos agradable o aguantable dependiendo de factores personales, en verano hay esencialmente tres problemas básicos que obstaculizan el trabajo.

mundosbl.blogspot.com

mundosbl.blogspot.com

PROBLEMA N. 1: Los horarios de verano

El curso termina, los pasillos de la universidad comienzan a vaciarse, hay siempre menos gente por el Departamento, empieza a haber horarios especiales, las bibliotecas van reduciendo su apertura… Es probable que al percibir que estamos en una época en la que en la universidad el nivel de afluencia disminuye, nuestras ganas de trabajar también vayan cayendo. Pero nosotros no nos podemos permitir dos o tres meses de descanso. Aprovecha la menor afluencia para concentrarte más y perder menos tiempo en colas inútiles en la cafetería o en el mostrador de la biblioteca. Haz del verano tu aliado.

PROBLEMA N. 2: tienes que trabajar en casa

Además de los horarios especiales, puede que nos cierren la universidad, o la biblioteca, y que tengamos que trabajar en casa. Si estás en esa situación, mi consejo es, en la medida de lo posible, el de acondicionar un lugar de trabajo. Es decir, no trabajar en la mesa del comedor o de la cocina, sino en un lugar que se asocia sólo al trabajo. Tener un lugar de trabajo específico, ordenado y cómodo es el primer paso para trabajar bien. Si no tienes la suerte de disponer de un «despacho» propio, intenta limitar las distracciones, evitar la procrastinación y trabajar más cuando las personas que viven contigo no están o están ocupadas.

PROBLEMA N. 3: Las vacaciones

Las vacaciones pueden influir negativamente en nuestra productividad de dos maneras:

  1. porque nos vamos de viaje;
  2. porque no nos cogemos vacaciones.

Empezamos por este segundo caso. Si no te vas de viaje la tentación de trabajar todo el verano es muy fuerte. Mi consejo es el de tomar igualmente un pequeño tiempo de descanso. Sé que es difícil dejar un poquito de lado el trabajo, y que eso genera sentimientos de culpabilidad, pero es absolutamente fundamental para poder mantener un buen ritmo de trabajo a la vuelta, para despejar la mente y para rendir más. A no ser que tengas que depositar en los próximos meses o tengas realmente algún problema importante, tomarse unas pequeñas vacaciones resulta más que saludable para nuestro cuerpo y espíritu.

En el primer caso, a parte de estar unos días desconectados, el error suele ser el de querer hacer demasiadas cosas antes de irnos de viaje, y eso puede generar estrés, puede dejarnos perder de vista los objetivos realmente importantes o puede crear insatisfacción o culpabilidad. Hay que reconocer que planificar no es fácil, pero lo que sí que se puede hacer es identificar nuestras prioridades. ¿Pasa algo si no acabas el artículo justo antes de irme de vacaciones? ¿Tendrás un poco de tiempo después? ¿No es demasiado ambicioso querer acabar todo el capítulo X de la tesis en dos semanas? ¿No es mejor escribir bien lo que dejas escrito y continuar a la vuelta? Mis consejos en este sentido son:

  • Identificar las prioridades máximas y cumplirlas (las imprescindibles, no todas, hay que seleccionar. Por cierto, navegar en Facebook no debería estar entre estas prioridades…)
  • Dejar notas con apuntes que nos puedan ayudar a retomar el trabajo a la vuelta
  • Dejar alguna tarea mecánica para momentos de cansancio o de pocas ganas o energía. Si estás escribiendo muy bien estos días, no te pongas a arreglar la bibliografía, déjalo para otro momento, por ejemplo para el primer día a la vuelta del trabajo.

Concentrarse, descansar y evitar la procrastinación son los tres ingredientes básicos de la productividad de los doctorandos en ámbito académico. Así que… un último esfuerzo y luego, ¡a disfrutar de nuestras merecidas vacaciones!

Un comentario en “Consejos básicos para trabajar bien en verano

Deja un comentario